paquete de baterías de níquel-cadmio
Un paquete de batería de níquel-cadmio representa una solución de energía recargable robusta y confiable que ha sido utilizada en varias industrias durante décadas. Estos paquetes de baterías consisten en múltiples celdas de níquel-cadmio conectadas en configuraciones en serie o en paralelo para alcanzar los requisitos deseados de voltaje y capacidad. La tecnología utiliza una reacción química entre oxihidróxido de níquel e hidróxido de cadmio para almacenar y entregar energía eléctrica de manera eficiente. Estos paquetes de baterías están diseñados para proporcionar una salida de energía constante durante su ciclo de descarga, manteniendo niveles estables de voltaje hasta casi su completa depleción. Funcionan eficazmente en un amplio rango de temperatura, desde -20°C hasta 70°C, lo que los hace adecuados para diversas aplicaciones. Su construcción incluye estuches resistentes que protegen contra daños físicos y aseguran una larga durabilidad. Algunas aplicaciones notables incluyen sistemas de iluminación de emergencia, herramientas eléctricas profesionales, equipos médicos y sistemas de aviación. Los paquetes de baterías incorporan características avanzadas de seguridad, como válvulas de alivio de presión y circuitos de protección térmica, para prevenir la sobrecarga y el sobrecalentamiento. Su capacidad para entregar una alta corriente de salida los hace particularmente valiosos en aplicaciones que requieren ráfagas repentinas de energía. Los requisitos de mantenimiento son mínimos, aunque se recomienda realizar periódicamente ciclos completos de descarga para prevenir el efecto memoria y mantener un rendimiento óptimo.